domingo, febrero 01, 2009

mensaje



cuando salgo de casa de mamá presto atención.
la calle tiene forma de "s" y hay una curva un tanto peligrosa.
presté atención, entonces.

un auto venia a velocidad moderada, dispuesto a realizar la curva.
lo miré, esperando cruzar.
de pronto una manchita en el aire
y un sonido seco
cae una pesada hoja de algún árbol
moviéndose y extendiéndose aun hacia el cielo
a una orilla en la cuneta.

la hoja se mueve un poco aún aturdida
me acerco a mirar
-que sea una hoja, que sea una hoja, que sea una hoja-
me acerco a mirar
-que sea una hoja, que sea una hoja, que sea una hoja-
como no había querido pensar
era un ave retorcida... y aún, dolorosamente, viva

su pechito se inflaba lentamente
y se volvia a desinflar
se inflaba y se volvia a desinflar
su mirada estaba fija en mi
y por su piquito balbuceaba un "mátame" silencioso y constante

con el último estruendoso palpitar de un pequeño corazón
escuché una súplica que impotente no pude atender.
solo me alivia -un poco- saber que en su último trágico momento
no fue una hoja seca, ni una mancha.
fue un mensajero.

1 comentario:

Tourangeau dijo...

Que hermoso y que triste...