pasó la tormenta, y entre las cosas que quedaron, están las ganas de levantarse.
y a pesar que el viaje se vienen un poco más duro y pesado,
el equipaje contiene un espíritu reforzado por los verdaderos buenos contactos que resistieron
más un integrante renovado y encadenado al escritorio.
¡volvió la música!
y un tecleo más suave esta vez.
tamos dándole como siempre
